Pagos de Araiz obtiene la ISO 14001 por su apuesta por la sostenibilidad y su conciencia medioambiental.
Esta certificación internacional demuestra el compromiso de la empresa por mejorar el rendimiento ambiental a través de la utilización eficiente de recursos y la disminución de residuos generados.
La bodega navarra Pagos de Araiz, perteneciente al prestigioso grupo vitivinícola Masaveu Bodegas, ha obtenido recientemente la certificación ISO 14001:2015, una norma internacional que demuestra su compromiso con la sostenibilidad y su conciencia medioambiental. Esta certificación le ayuda a continuar mejorando su rendimiento mediante el uso eficiente de los recursos y la reducción de los residuos asumiendo la gestión de los riesgos medioambientales asociados a la elaboración de vinos y la protección del medio ambiente, así como las cambiantes condiciones ambientales.
Las normas ISO (International Organization for Standardization) reconocen la necesidad de normalización de herramientas de gestión en el dominio ambiental siendo la ISO 14001 la norma de referencia para la implementación y certificación de un Sistema de Gestión Ambiental, ya que esta norma identifica los requisitos para una gestión eficaz del riesgo, considerando la prevención y la protección del medio ambiente, la conformidad legal y las necesidades socioeconómicas. Ayuda, en definitiva, a manejar cada uno de los impactos ambientales que la organización genere.
“Entendemos el compromiso, cuidado y preservación ambiental como parte de la filosofía de Masaveu Bodegas y, por ello, apostamos desde Pagos de Araiz con la protección y mejora del medio ambiente, su protección y su mejora en todos los rincones de la actividad, desde el campo hasta la bodega” afirma Juan Glaría, enólogo y director técnico de la bodega navarra. “Esta certificación es solo un paso más que avala nuestros métodos de trabajo, aquí elaboramos vinos en armonía con la naturaleza, sin la cual estos no serían posibles”, concluye.
La bodega Pagos de Araiz, está inscrita, además, en el Registro Oficial de Huella de Carbono, compensación y proyectos de absorción de CO2 del Ministerio para la Transición Ecológica, y viene realizando, aprovechando el uso de la tecnología y la innovación, una fuerte apuesta por la sostenibilidad con el desarrollo de varios proyectos de investigación dirigidos a respetar y mejorar el ecosistema que rodea las labores vitivinícolas siendo una de las 50 bodegas españolas con la certificación Wineries for Climate Protection (WFCP), la primera y única certificación específica para el sector del vino en materia de sostenibilidad medioambiental.
En la actualidad, Pagos de Araiz posee 32 hectáreas de viñedo acorde a los criterios de Agricultura Ecológica y 210 siguiendo pautas de Producción Integrada con el objetivo de transformarlas en ecológico en un futuro a medio plazo.
Una de las medidas adoptadas para la mejora de la sostenibilidad en la finca son la reforestación para evitar la erosión del suelo, reducir la huella de carbono y facilitar la proliferación de insectos polinizadores y depredadores reduciendo el uso de pesticidas y herbicidas. En lo que respecta al control y el uso del agua, la bodega prioriza la optimización del agua del riego realizando un seguimiento a través de sondas de humedad.
La Bodega Pagos de Araiz, en colaboración con la Universidad de Navarra, estudia a través de un proyecto de I+D los efectos del cambio climático en el viñedo, así como la aplicación de nuevas técnicas tanto en campo como en bodega que permitan reducir el grado alcohólico, corregir la acidez o retrasar la maduración, en definitiva, hacer frente a los posibles efectos negativos del cambio climático sobre el viñedo o los vinos.
Esta bodega coordina, además, el proyecto Oivina, financiado por la Unión Europea y el Gobierno de Navarra, que propone el desarrollo de un modelo predictivo para luchar contra el oídio, una de las enfermedades más graves del viñedo, no sólo específicamente adaptado a las condiciones agroclimáticas particulares de Navarra, sino teniendo en cuenta por primera vez factores como los manejos de cultivo que se realizan en el viñedo.
Bodega Pagos de Araiz
Con la adquisición de la Finca de Pagos de Araiz en Olite, por la familia Masaveu en el año 2000, germinó un proyecto fresco y atrevido en la tradicional D.O. Navarra. Esta apuesta comenzó con la construcción de una bodega absolutamente vanguardista de 14.000 m2 y de estilo château situada a las afueras de la villa medieval Olite.
En los tres años siguientes, se plantaron alrededor de las instalaciones, en esa finca de 300 hectáreas, 240 de viñedos propios de distintas variedades de uvas (tempranillo, graciano, garnacha, merlot, cabernet sauvignon, chardonnay y syrah). Su innovadora forma de gestión y una amplia oferta enoturística, conecta Pagos de Araiz al peso histórico, natural y vitivinícola del entorno con el arte y la gastronomía. Pagos de Araiz permite a los visitantes disfrutar del mundo del vino y del arte en un territorio vitivinícola clásico y emergente al mismo tiempo.