Kripta Gran Reserva 2007
(Agustí Torelló i Mata)
La aportación que la bodega familiar Agustí Torelló Mata ha hecho para el cava desde sus inicios es difícil de resumir en una sola página. Realmente, esta bodega nacida en 1950, es hoy en día una de las más reconocidas por el gran público por la enorme calidad final que ofrecen todos sus productos. Defensores de la singularidad varietal, siempre han apostado por mantener su identidad ligada a las variedades autóctonas, practicando una viticultura sostenible y “aliándose” con cepas viejas de las que extraen su mejor versión.
Vista
Amarillo pajizo muy brillante. Burbuja fina y constante con formación de espuma muy blanca y compacta.
Nariz
Elegante y floral, con muy buena intensidad. Es realmente fresco. Recuerdos a manzana madura, grano de trigo tierno y flores blancas. Ligeras notas de crema inglesa muy agradables.
Boca
Envolvente, con muchos recuerdos vínicos, acidez pronunciada y elegancia final que lo convierten en un cava muy agradable. El carbónico es amable y muy refrescante.
Comentario
La particularidad de las botellas de la bodega es reconocida a lo largo de todo el mundo. Siempre han sido elegantes y con acabados excelentes pero quizás Kripta sea la botella más singular que existe en el mundo del cava. Y es que su inconfundible forma de ánfora romana, obra del artista Rafael Bartolozzi, ha seducido y ha puesto a prueba nuestra destreza equilibrista a partes iguales, desde que vio la luz en 1979. Pero no solo el vestido enamora de este gran cava, su “alma”, su “esencia”, es notablemente superior. Un cava gran reserva con un mínimo de 48 meses de crianza con cierre de corcho natural, sin ningún tipo de maquillaje, que hace gala del cupage tradicional del cava, que se muestra siempre armónico, elegante, fresco y muy gastronómico. El centro de atención de una velada inolvidable. La pareja de baile perfecta para un arroz de langosta con erizos de mar