Delamotte Blanc de Blancs 2002
(Champagne Delamotte)
Fundada en 1760 en Reims, cumplió recientemente su 250 aniversario, ha destacado siempre por el emplazamiento de sus vides en “el viñedo rey de la champaña”, el Grand Cru Le Mesnis sur Oger y por su incondicional “hermandad” desde 1988 con la prestigiosa maison Salon con la que comparte equipo técnico y propiedad. Aunque forma parte del mayor grupo familiar de Champagne, Delamotte sigue manteniendo su esencia inicial siendo un referente cualitativo en la región y muy apreciado en el mundo de los connaisseurs más avezados. Resaltando siempre incondicionalmente las virtudes de la uva Chardonnay, sus champagnes son elegantes, esmeradamente elaborados y sensitivamente muy agradables. Champagne verdadero para llegar a todo el mundo sin renunciar un ápice a la calidad.
Vista
Color amarillo cobrizo brillante. Burbuja muy fina y constante con formación de espuma muy blanca.
Nariz
Exuberantemente cremosa. Recuerdos muy evidentes de fruta madura cocida al horno. Notas de autolisis que recuerdan a brioche, crema quemada, nueces garrapiñadas.
Boca
Voluminosa, muy contundente, con evidencias de fruta confitada y cítricos licorosos. El carbónico equilibra con frescor el final de boca. Muy limpio.
Comentario
Existen en el mercado cientos de espumosos que hacen gala de su singularidad para ser los elegidos en representar, en ciertas añadas, el estilo o la destreza de las casas de champagne. Desgraciadamente, algunas veces, ese honor se queda lejos o muy lejos de las pretensiones figuradas por ciertas firmas. En el caso de Delamotte, por suerte, no es así y su “Do de pecho” es magistral. Proveniente de la magistral añada 2002, este “joven” champagne milesimado dará alegrías futuras muy apreciadas a los fans de los sabores intensos, cremosos y golosos. Es equilibrado y muy sabroso. Descaradamente robusto, es muy contundente cuando entra por primera vez en boca y su potencia incita a ser combinado forzosamente con algún festín que este a la altura. Unas vieiras frescas sobre parmentier de trufa, es un juego de niños para este gran champagne.